Se me ha olvidado contabilizar las amortizaciones en años anteriores, ¿he perdido para siempre ese gasto?

Es frecuente que algún año se nos
haya olvidado amortizar algún elemento del inmovilizado, ¿he perdido ese gasto
para siempre? ¿Puedo compensar la amortización no deducida del ejercicio
anterior en ejercicios posteriores amortizando por encima del máximo? ¿Hay
algún límite?
La Ley del Impuesto sobre
Sociedades permite que se pueda corregir en ejercicios posteriores cuando la
amortización deducida en ejercicios anteriores es inferior al porcentaje
mínimo.
Para ello, se deben cumplir los
siguientes requisitos:
1) Que
el elemento patrimonial se haya amortizado contablemente en algún ejercicio por
un importe inferior al resultante de aplicar el coeficiente mínimo según
tablas.
2) Que
las amortizaciones contabilizadas en los ejercicios posteriores sean superiores
al importe resultante de aplicar el coeficiente máximo según tablas.
3) Que
consecuencia de ello no derive una menor tributación a la que hubiera
correspondido por aplicación de las reglas de imputación temporal.
Si se cumple con estos
requisitos, el referido exceso de amortización sobre el coeficiente máximo
según tablas se entiende que corresponde a la amortización de aquél ejercicio en
que se amortizó por debajo del coeficiente mínimo según tablas, con el límite
de la amortización resultante del coeficiente mínimo.
A estos efectos, hay que tener
presente el periodo de prescripción de cuatro años. De modo que si el ejercicio
en que amorticé por debajo del mínimo corresponde a un ejercicio prescrito, el
gasto se imputará a dicho ejercicio, pero no será deducible y no tendrá efectos
fiscales ni en el periodo en que se imputa (ejercicio prescrito) ni en el que
se registra el gasto.
Ejemplo:
Un escritorio que se adquirió por
importe de 5.000 euros se amortiza según tablas al coeficiente lineal máximo
del 10% y un periodo de años máximo de 20 años. Rango de amortización mínima y
máxima se encuentra entre 500 y 1.000 euros.
Posibilidades:
A)
AÑO | 1 | 2 | 3 | 4 | 5 | 6 | 7 |
AMORT. CONTABLE | 0 | 500 | 1.000 | 750 | 1.000 | 550 | 1.000 |
Este supuesto no cumple con los
requisitos exigidos para compensar el año 1 en el que no se amortizó nada,
puesto que en ningún año posterior ha habido un exceso de amortización.
Todo el gasto de amortización
contable es fiscalmente deducible.
B)
AÑO | 1 | 2 | 3 | 4 | 5 | 6 |
AMORT. CONTABLE | 500 | 550 | 1.950 | 1.000 | 1.000 | 0 |
Por tanto, en el año 3 habrá que
realizar un ajuste positivo de 950 €, y en el año 6 un ajuste negativo de 950
€.
C)
AÑO | 1 | 2 | 3 | 4 | 5 | 6 |
AMORT. CONTABLE | 0 | 750 | 1.500 | 1.000 | 1.000 | 750 |
Este supuesto cumple con los
requisitos, entendiendo que en el año 3 se imputa la amortización que no se
dedujo en el año 1, teniendo como límite el coeficiente mínimo (500 €), por lo
que será totalmente deducible la amortización el ejercicio en que se contabiliza,
esto es, el año 3.
Si ha derivado una menor
tributación, entonces el exceso de amortización de 500€ contabilizado en el año
3 se imputan fiscalmente al año 1.
D)
AÑO | 1 | 2 | 3 | 4 | 5 |
AMORT. CONTABLE | 0 | 1.000 | 1.250 | 1.500 | 750 |
Este supuesto cumple con los
requisitos, considerando que en los años 3 y 4 se están compensando las
amortizaciones devengadas y no contabilizadas del ejercicio 1.
Si no deriva una menor
tributación, serán fiscalmente deducibles en los ejercicios 3 y 4 las
amortizaciones contabilizadas. Sin embargo, hay que tener en cuenta el límite
resultante de aplicar el coeficiente mínimo (500€), por tanto, los excesos de amortización
de 250 € y 500 € de los ejercicios 3 y 4, respectivamente, se imputan al
ejercicio 1 los 250 € íntegros del ejercicio 3 y otros 250 € del ejercicio 4.
Queda un exceso no deducible en el ejercicio 4 por importe de 250 €, que será
deducible en el ejercicio 5.
El exceso de amortización del
ejercicio 4 genera un ajuste extracontable positivo por importe de 250 € y en
el ejercicio 5 un ajuste extracontable negativo por el mismo importe.
E)
Se me ha olvidado todos los años
contabilizar el gasto de amortización y doy de baja el elemento contabilizando
una pérdida extraordinaria de 5.000 € (0 – 5.000 = -5.000):
Valor de Transmisión: 0
Valor de Adquisición: valor contable (VA –
amortizaciones) = 5.000 – 0 = 5.000
La pérdida contabilizada no sería
fiscalmente deducible puesto que se entiende que dicha pérdida representa las
amortizaciones no contabilizadas en cada ejercicio en que se depreció el
elemento.
En el ejercicio en que se
registre la pérdida extraordinaria por dar de baja el elemento se deberá
practicar un ajuste positivo de 5.000 € para contrarrestar la pérdida generada por la baja del elemento.